Las moratorias en el pago de las hipotecas y alquileres, así como el mantenimiento de suministros básicos (agua, luz…) para colectivos vulnerables se amplía hasta finales de septiembre. El Consejo de Ministros aprobó el pasado martes la prórroga de las medidas económicas y sociales en el ámbito de la vivienda del Real Decreto-ley 11/2020, de 31 de marzo, por el que se adoptaban medidas urgentes complementarias en el ámbito social y económico para hacer frente al covid-19.

Nuevos plazos para acceder a ayudas a vivienda, factura de la luz u otros suministros básicos

  • El Real Decreto-ley amplía hasta el 30 de septiembre la petición de las moratorias de hipotecas de vivienda habitual y de alquiler, aliviando las cargas financieras. La moratoria legal (la que otorga el Gobierno) y la convencional (la que otorga el sector financiero) se podrán conceder simultáneamente. Los hogares que soliciten ambas serán beneficiarios de una moratoria legal de 3 meses (sin devengo de intereses, hasta diciembre), seguida de una moratoria convencional de 9 meses (con devengo de intereses). A 30 de junio, se han concedido el 83% de las solicitudes de moratoria, 226.285 en total.
  • En cuanto a las medidas para proteger a las personas en situación de vulnerabilidad que viven de alquiler, podrán solicitar hasta el 30 de septiembre la prórroga de 6 meses de los contratos de arrendamientos sobre vivienda habitual. Se amplía también hasta el 30 de septiembre el plazo para solicitar la moratoria o el aplazamiento del pago de la renta de los contratos de arrendamiento de vivienda, en caso de que el arrendador sea gran tenedor de vivienda, para aquellos hogares que se encuentren en situación de vulnerabilidad económica. Además, la prohibición de los desahucios sin alternativa habitacional seguirá vigente hasta el 2 de octubre.
  • Se extiende hasta el 29 de septiembre la posibilidad de solicitar la moratoria a fin de evitar la sucesión de impagos de créditos o préstamos sin garantía hipotecaria para la adquisición de la vivienda habitual o de inmuebles afectos a la actividad económica que desarrollen empresarios y profesionales por parte de las personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad económica.
  • Además, se extiende hasta el 30 de septiembre la garantía de la continuidad del suministro energético y de agua para consumidores domésticos en vivienda habitual. Esta medida había finalizado el pasado 20 de junio. Igualmente, para los consumidores domésticos acogidos a esta medida, el período de tiempo de esta no computará a efectos de los plazos de los procedimientos de suspensión del suministro iniciados con anterioridad a dicho período.

Asimismo, se mantienen los criterios fijados anteriormente para definir la vulnerabilidad económica de las personas y acreditarla.

La vivienda, un lujo en la actualidad: hace falta un plan a largo plazo

Desde USO recordamos que estas medidas de urgencia deben ir acompañadas de un ambicioso plan para que la vivienda no sea un lujo, sino un derecho. La juventud y otros colectivos empobrecidos arrastran durante años la falta de opciones para acceder a una vivienda y emanciparse.