El Índice de Precios de Consumo (IPC) descendió un 0,2% en marzo en relación al mes anterior mientras que a en los tres primeros meses del año la bajada se acentúa en un 1,2 por ciento.
A nivel nacional, el IPC baja con respecto a febrero en 4 décimas y se sitúa en el 0,0% mirando a marzo de 2019, lo que supone un descenso del 0,7% en la inflación interanual. Datos que hay que tomar con “precaución, pues son reflejo de un escenario irreal, en el que muchos de los bienes están en cuarentena desde mitad de mes, como nosotros”, advierte Joaquín Pérez, secretario general de USO.
Sin embargo, “es llamativo que dos de las pocas cosas que seguimos consumiendo y de las que en estas circunstancias tenemos aún más dependencia, como son alimentos básicos o el sector de las comunicaciones sí hayan subido. Y otros productos, por no ser significativos antes de la crisis sanitaria, como las preciadas mascarillas o los guantes profilácticos, no se reflejan”, observa Pérez.
En cuanto a la alimentación, ha subido el precio de dos grupos básicos, el pescado y marisco, y la carne. En las comunicaciones, “la base para el nuevo modelo de trabajo que se ha instaurado apresuradamente para adaptarnos a la pandemia, ha habido un repunte en los precios de los servicios. Es importante señalar que no es solo necesario para que podamos trabajar, sino que se trata también del único entretenimiento al que muchas familias pueden optar y debería vigilarse que no hubiera una picaresca o abuso en las tarifas”, demanda el secretario general de USO.