Igual que los adultos, los niños y adolescentes pueden sentir inseguridad, vulnerabilidad, inquietud, preocupación, miedo…. Por eso es importante que vuelvan al colegio: los alumnos necesitan socializarse para desarrollar sus habilidades físicas, cognitivas y sociales.
La secretaria de Acción Sindical y Salud Laboral de Federación de Enseñanza (FEUSO), Imma Badía Camprubí, asegura que «el contacto con otros niños y con los profesores es imprescindible para que progresen en sus capacidades psicomotrices, de comunicación oral y escrita, resolución de problemas, agilidad, autoconfianza, empatía, curiosidad, imaginación…»
Afirma Badía que «también es importante que los niños y adolescentes aprendan a convivir con la pandemia y a relacionarse con los nuevos parámetros de prudencia que requiere la actual situación». Por ese motivo, «es importante reforzar la idea de que volver a clase es positivo y tiene múltiples ventajas tanto para lidiar con sus propios miedos, incertidumbres y angustias como para facilitar la gestión de todas estas emociones y la recuperación de los hábitos escolares».
0-6 años: Transmitir seguridad
Frente a los niños pequeños hay que adoptar una postura segura y transmitir tranquilidad, aunque los adultos no se sientan seguros. Si los niños ven miedo en los padres o en adultos de referencia, esto puede impactarlos a largo plazo. Recordar que la angustia también se transmite por el tono de voz, el estado de ánimo, etc.
6-12 años: Tranquilizar sin negar la realidad
En esta edad, la gestión de los miedos depende de lo que perciben en casa y de cómo procesan las informaciones que escuchan de otros niños y de lo que ven en internet o en la televisión. Se trata de dar a los chavales seguridad, de preguntarles qué necesitarían para no tener miedo de ir al colegio.
Preadolescentes y adolescentes: Transmitir información
Por lo que respecta a preadolescentes y adolescentes, envsus miedos impacta más lo que les digan los amigos que lo que les diga su padre o su madre o su profesor, pero hay que ser transparentes con ellos, explicarles qué es lo que nos genera sensación de inseguridad o por qué estamos preocupados, qué medidas de prevención han de seguir y cumplir (aunque otras familias tengan otros criterios), qué pasará si se contagian o qué protocolos ha establecido la escuela… Hay que involucrarles en la idea de que no sabemos qué va a ocurrir, que hay que convivir con esa incertidumbre, pero que mientras dure, hemos de
ser bastante prudentes.
¿Qué podemos hacer desde el colegio?
Acotar el miedo: el virus no va a desaparecer y hay que aprender a vivir con él e intentar vivir con normalidad. Hay que tener claro que esta situación va para largo, así que el miedo, la incertidumbre, la angustia se van a alargar, hemos de admitirlo. Para gestionar el alud de nuevas emociones y la ansiedad de estos días, la clave es vivir el presente.
La base para facilitar la vuelta al colegio es que los adultos empiecen por controlar su miedo, por asumir que el riesgo cero de contagio no existe (ni aunque los niños se queden en casa, porque los adultos trabajan, se relacionan…) y por entender que la vuelta a las aulas es fundamental para el desarrollo de sus hijos.
Comenzar la adaptación
Además de gestionar estas nuevas emociones que acompañan la vuelta al colegio este año, también hay que seguir el proceso de adaptación escolar de cada curso: hay que ir cambiando los horarios y las rutinas a las que serán cuando empiece el curso; debemos ser motivadores y hacer
de la vuelta al colegio algo ilusionante; hay que facilitar si es posible contactos con compañeros; darles la responsabilidad de preparar los materiales, la ropa y todo lo que vayan a necesitar en el futuro…
Necesitamos continuar con nuestra vida y este retorno nos brinda una oportunidad para recuperar nuestro bienestar. Debemos afrontar el miedo y la incertidumbre. Nuestras fortalezas, así como lo aprendido en esta experiencia y el esfuerzo de adaptación realizado gestionando emociones diferentes y a veces intensas, pueden ayudarnos mucho.
Desde USO, ponemos a disposición de todos los centros educativos y de los docentes y trabajadores del sector el Gabinete de Prevención de Ayuda al Docente, para poder resolver las dudas y preguntas relacionadas con la vuelta al cole. Además, emplazamos tanto a las administraciones correspondientes como a las direcciones de los centros educativos a que cumplan con las medidas preventivas correspondientes para garantizar la seguridad y salud de
todos los trabajadores y alumnos.