Las empleadas de hogar tienen derecho a cobrar el paro

Las empleadas de hogar tienen derecho a cobrar el paro

El Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó el mes pasado que España contraviene la normativa comunitaria al excluir a los trabajadores del hogar, mayoritariamente mujeres, de la prestación por desempleo, y por tanto es contraria al Derecho de la Unión.

El caso hace referencia a la denuncia que presentó una trabajadora del hogar ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 2 de Vigo, a quien la Tesorería General de la Seguridad Social denegó su solicitud de cotizar para recibir el paro.

Su empleador estaba dispuesto a abonar la cotización que solicitó la trabajadora, pero la Tesorería la rechazó porque la protección que confiere el sistema especial de Seguridad Social para empleados del hogar no comprende la protección por desempleo.

¿Cuál es la regulación actual en materia de la prestación por desempleo de las empleadas de hogar en España?

La relación laboral de las empleadas de hogar se rige por el Sistema Especial para Empleados de Hogar, y la Ley General de la Seguridad Social excluye a este colectivo de la acción protectora de la prestación por desempleo.

Al contrario, se incluye en la protección por desempleo, siempre que tengan previsto cotizar por esta contingencia, a los trabajadores por cuenta ajena incluidos en el Régimen General de la Seguridad Social, del que las empleadas de hogar no forman parte.

De esta manera, la norma deja desprotegidas a las empleadas de hogar que por perder su empleo, bien por acuerdo mutuo, bien como consecuencia del desistimiento del empleador, quedan excluidas también de acceder a cualquier otra prestación o subsidio supeditados a la extinción del derecho a las prestaciones por desempleo. Es una situación que deja en desamparo a las trabajadoras de este sector.

Motivos discriminatorios para excluirlas del derecho a desempleo

Es impactante que la TGSS y el Gobierno argumenten que la falta de dicha protección deriva del hecho de que este colectivo presenta elevadas tasas de empleo; un escaso nivel de cualificación; un porcentaje considerable de trabajadores no afiliados al Sistema; porque su empleador no es un empresario profesional y no obtiene un beneficio por el trabajo por cuenta ajena de dichos empleados; que el trabajo se ejecute en el ámbito del hogar familiar, etc., y que todo ello justifique y cause la exclusión de la prestación por desempleo.

La argumentación acerca de que el incremento de las cargas y de los costes salariales resultantes del aumento de las cotizaciones para cubrir la contingencia de desempleo podría reducir nuevas contrataciones y extinguir los existentes, así como el aumento del trabajo ilegal y de fraude a la Seguridad Social tampoco parece coherente para privar al colectivo de esta protección.

Así, de manera indirecta, se responsabiliza a las empleadas de hogar de las elevadas tasas de empleo ilegal y el fraude en la Seguridad Social. El TJUE anota, de forma correcta, que el fraude puede ocurrir en cualquier sector y no tiene que ver con el régimen de la SS. Y que, además, otros colectivos de trabajadores cuya relación laboral se desarrolla a domicilio para empleadores no profesionales, o cuyo sector laboral presenta las mismas peculiaridades en términos de tasas de empleo, de cualificación y de remuneración (jardineros, conductores particulares, trabajadores agrícolas y trabajadores contratados por empresas de limpieza) sí están cubiertos frente a la contingencia de desempleo. A pesar de que sus cotizaciones son, en algunos casos, inferiores a las aplicables a las empleadas de hogar.

Excluir a las empleadas de hogar del cobro del paro o prestación por desempleo no parece ser coherente en comparación con otros colectivos de trabajadores que disfrutan de esas mismas prestaciones pese a presentar características y condiciones de trabajo parecidas a las de las empleadas de hogar.

El Gobierno anuncia que regulará el derecho a paro de las empleadas de hogar

Tras conocer la sentencia del TJUE, el Ministerio de Trabajo y Economía Social ha anunciado que este año regulará el derecho a paro para las trabajadoras del hogar. Es probable incluso que el pronunciamiento del tribunal europeo acelere este proceso.

Las empleadas de hogar son el único colectivo sin derecho a paro en España y el TJUE ha determinado que es una discriminación indirecta por razón de género. El 90 % de este colectivo son mujeres. Y, en cifras, son, aproximadamente, unas 400.000 afiliadas a la Seguridad Social y otras 150.000 sin dar de alta.

El Gobierno también tiene pendiente la ratificación del Convenio 189 de la OIT, que provoca que las trabajadoras de hogar carezcan de los mismos derechos que el resto de trabajadores frente al despido, la protección por desempleo o la prevención de riesgos laborales, entre otros aspectos. Desde USO, reiteramos nuestra petición al Gobierno para que lo ratifique urgentemente; ya que, después de una década desde su acuerdo, sigue sin adoptarse.

Además, USO reclama un cambio en el Régimen Especial de Empleados de Hogar y que se destinen recursos para conseguir un cambio de paradigma en el sistema de cuidados español.

La brecha de género en el paro aumenta 2 puntos en el último año

La brecha de género en el paro aumenta 2 puntos en el último año

El número de parados en la Comunidad de Madrid ha bajado un 4,43% en febrero, un dato positivo que sin embargo contrasta la brecha de género, que en el último año se ha ahondado dos puntos. El pasado mes de febrero, las mujeres suponían un 57,3% del total de personas desempleadas. Este año, el porcentaje asciende a 59,3%.

Hace un año había 447.101 madrileños en paro, de los cuales 256.183 eran mujeres (57,3%) y 190.919 eran hombres. Este mes de febrero, del total de 340.187 personas en paro, 138.360 son hombres y 201.826 son mujeres (59,32%), según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social publicados este miércoles. Mientras que en términos interanuales, el paro en la región ha bajado un 23,91%, con 106.914 parados menos con respecto febrero de 2021, lo cierto es que esa recuperación no se está produciendo de forma igualitaria para hombres y mujeres.

Esta brecha, creada hace ocho años y que se agranda de forma progresiva, llama especialmente la atención a escasos días del 8 de marzo y resulta paradójica teniendo en cuenta que estamos ante un mes récord en contratos indefinidos firmados. Del total de contratos, 62.238 fueron indefinidos en Madrid, lo que supone 13.172 más de los firmados en enero, una subida del 26,85%.

Además, 21.942 desempleados de la región en el mes de febrero tienen menos de 25 años, de los cuales 11.294 son hombres y 10.648 mujeres, lo que significa que la brecha de género llega cuando las mujeres alcanzan la edad en la que tradicionalmente inician sus respectivos proyectos familiares.

En 2022, las mujeres padecen una mayor tasa de desempleo y una mayor temporalidad en sus trabajos que los hombres. Son mayoría entre las personas que reciben salarios mínimos, y son las que, en mayor medida, trabajan a tiempo parcial, recurren a las reducciones de jornada y excedencias, o cambian de empleo para cuidar de otras personas. No solo hay más mujeres trabajando sin ser remuneradas, sino que, entre las personas trabajadoras, las mujeres asumen la mayor parte de las tareas del hogar.

Por ese motivo, este 8M volvemos a poner el foco en el desigual reparto del tiempo de trabajo remunerado y los cuidados entre hombres y mujeres. La consecuencia de esta situación es una importante brecha de género a nivel laboral y económico. Una brecha que, por otro lado, se ha visto agravada por los efectos de la pandemia, que han acentuado notablemente las desigualdades.

Baja el paro en Madrid, pero las mujeres y los extranjeros se quedan atrás

Baja el paro en Madrid, pero las mujeres y los extranjeros se quedan atrás

Es innegable que la bajada del número de parados registrados durante este mes de enero en las oficinas de los servicios públicos de empleo en la Comunidad de Madrid (-2,67%) es positiva, especialmente teniendo en cuenta que este es un mes en el que suele aumentar el desempleo por el fin de la campaña de Navidad. Aun así, no podemos olvidar que todavía hay un total de 355.957 personas en paro en la región y además, la afiliación a la Seguridad Social en la Comunidad de Madrid durante el mes de enero descendió un 0,74% en relación al mes anterior, y perdió una media de 24.997 cotizantes.

De la cifra total de desempleados en la Comunidad de Madrid, 146.486 son hombres y 209.471 son mujeres. Un total de 23.098 desempleados de la región en enero tienen menos de 25 años, de los cuales 11.976 son hombres y 11.122 son mujeres.

Por sectores, el que engloba mayor número de parados es el de Servicios, con 282.463, lo que se traduce en 5.287 menos que el pasado mes de diciembre, seguido de Construcción, 26.999, que cuenta con 1.543 parados menos.

Por su parte, destaca Industria, con 20.511, lo que supone un total de 322 desempleados menos y Agricultura, con 2.866 desempleados en este sector, lo que se traduce en 149 parados menos con relación al mes anterior. Por su parte, 23.118 vienen del grupo de sin empleo anterior.

En cuanto al paro entre extranjeros, se situó en 57.448 personas, lo que se traduce en 2.446 personas más respecto al mes anterior y una caída del 4,08%. Con respecto al mes de enero de 2021, hay 26.537 parados extranjeros menos, un descenso del 31,6%. Del total, 23.902 proceden de países comunitarios y 33.546 de extracomunitarios.

Si tenemos en cuenta la comparativa anual, el empleo se está recuperando de las peores consecuencias de la pandemia. A pesar de ello, no hay lugar para un excesivo optimismo porque, España continúa liderando las tasas de paro en Europa. Además, se sigue excluyendo de la recuperación a las mujeres y a los extranjeros.

Se cierra el año con menos horas trabajadas que en 2019

Se cierra el año con menos horas trabajadas que en 2019

El paro en la Comunidad de Madrid bajó un 14,97% en el trimestre octubre-diciembre de 2021 con respecto al trimestre anterior (julio-septiembre), con 62.900 personas menos en desempleo, lo que sitúa la cifra de parados en 357.500, 122.500 menos que en el cuarto trimestre de 2020 (-25,53%). La secretaria general de USO-Madrid, Conchi Iniesta ha señalado que es una buena noticia la creación de empleo en la comunidad, pero es necesario que ese empleo no sea precario y temporal”.

Con esta cifra, la tasa de paro en la Comunidad de Madrid al término de diciembre era del 10,12%, con un total de ocupados de 3.175.600, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) dados a conocer este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Según los datos de la EPA, Madrid tuvo uno de los mayores incrementos de empleo en el cuarto trimestre de 2021 (46.300 más), por detrás de Andalucía (102.300) y Canarias (59.600), frente a los mayores descensos observados en Illes Balears (–73.200), Galicia (–21.200) y Extremadura (–17.600).

“Es el momento de decidir qué modelo de trabajo queremos y por eso exigimos la derogación de la reforma laboral de 2010 y 2012. Tampoco sirve el acuerdo firmado entre el Gobierno, CCOO, UGT y las patronales, porque no permitirá recuperar los derechos laborales perdidos durante todo este tiempo”, ha señalado Iniesta.

En Madrid, al término del trimestre octubre-diciembre el total de trabajadores llegó a 3.175.600 personas y la tasa de actividad se situó en el 63,06% de la población activa, según la EPA. Del total de ocupados 1.634.800 eran hombres (una tasa de actividad del 67,88 %) y 1.540.700 mujeres (tasa de actividad del 58,72%).

En comparación con el último trimestre de 2020, en Madrid los ocupados subieron entre octubre y diciembre de 2021 en 108.100 personas, un 3,52 % más, y frente al tercer trimestre del año pasado las cifras de la EPA muestran que en el trimestre posterior hubo 46.300 ocupados más, lo que supone un aumento del 1,48 %.

Menos horas trabajadas que en 2019

A nivel nacional, 2021 cerró con más ocupados y menos paro que 2020. A pesar de los 615.000 parados menos y bajada de 2,80 de la tasa de paro, lo cierto es que no hemos conseguido volver al volumen de empleo previo a la pandemia.

Así, la creación de empleo anual se sitúa en 840.700 nuevos ocupados y crece hasta los 20.184.900. Sin embargo, España no ha recuperado aún las horas efectivas de trabajo previas a la pandemia. Comparado el cierre de 2021 con el de 2019, aún estamos un 3,80 % por debajo.

“Este dato nos alerta de que el empleo es cada vez más parcial, temporal y precario. Si crecen los ocupados, pero bajan las horas trabajadas, estamos ante un aumento de las jornadas parciales, de los trabajos por semanas y días. En la USO siempre hemos dicho que el empleo está troceado, pero ahora mismo está atomizado”, señala Joaquín Pérez, secretario general de la Unión Sindical Obrera.

Una situación “que debería haber sido la prioridad de la reforma laboral, que se ha quedado en la foto y en medidas superficiales, validando con su aprobación los recortes de las dos anteriores reformas que no se han tocado. Un texto insuficiente y decepcionante que no cumple con su objetivo de recuperar los derechos laborales que se recortaron y ya se dan por perdidos en la nueva ley”, advierte el secretario general de USO.

Pérez también alerta “de los empleados de usar y tirar de la Administración”. En este sentido, ha crecido la ocupación en el sector privado (162.500 personas) y se ha reducido en este trimestre en 8.500 la del sector público.

“Las Administraciones Públicas han estado parcheando sus plantillas para atender a la sobrecarga de prestaciones y atención a la ciudadanía derivadas de la pandemia. Sin embargo, esa sobrecarga no se ha terminado y no solo no se estabiliza el empleo público, sino que se finiquitan los contratos de refuerzo. Las Administraciones siguen jugando al margen de las propias reglas que imponen para el sector privado y lo pagan tanto sus empleados como las prestaciones más básicas al ciudadano”, incide el secretario general de USO.

El ‘black contract’ maquilla los datos del paro de noviembre

El ‘black contract’ maquilla los datos del paro de noviembre

Este mes se ha registrado una contratación récord en España con un total de 270.745 contratos suscritos en la Comunidad de Madrid. Sin embargo, el número de parados únicamente ha descendido en 11.477 personas en la región con respecto al mes de octubre. ¿Cómo es posible?

“Noviembre es la antesala de la campaña de Navidad, el problema es que al igual que con el black friday, la calidad del empleo se mueve a través del black contract”, afirma la secretaria general de USO-Madrid, Conchi Iniesta.

De este modo, a pesar de que los contratos firmados se han incrementado un 9,15% con respecto al mes pasado, el desempleo ha bajado un 2,86% en el mismo tiempo. “El Ejecutivo presume de contratación, pero a la hora de la verdad, eso no se traduce en empleo efectivo y de calidad”, denuncia Iniesta.

Del total de contratos, un 81,17% son temporales (216.372) y un 18,83% son indefinidos (54.373). Según estas cifras, Madrid parece una de las comunidades en las que más contratos indefinidos se han firmado durante este mes. Sin embargo, la clave está en las conversiones de contratos temporales a indefinidos.

“Esto explica también que no se haya creado tanto empleo como debería. Más de una tercera parte de los contratos indefinidos que se han firmado en noviembre son conversiones (19.944). Son personas que ya estaban contratadas, la mayoría con contratos temporales en fraude que deberían no ser temporales. Ahora todos ellos figuran en las estadísticas como nuevos contratos, pero no lo son”, señala Iniesta.

“Es innegable que los datos del paro continúan una tendencia positiva en número, pero ha llegado el momento de decidir qué modelo de trabajo queremos”, afirma Iniesta. “El objetivo no es abandonar el paro por cualquier contrato, sino abordar una reforma laboral urgente, valiente y sin dobleces”.